SINOPSIS
Tara: treintañera, con serios problemas de autoestima y un novio que se
dedica a criticarla. Katherine:
treintañera, incapaz de aventurarse a tener cualquier clase de relación con un
hombre. Fintan: treintañero, gay con
pareja que trata de ayudar a sus dos mejores amigas para que sean felices. Preocupaciones comunes: una pareja
estable, el sexo, el peso y el empleo.
Aficiones comunes: emborracharse juntos y contarse sus más íntimos
secretos. La última oportunidad: llegará a través de los deseos de un moribundo.
Es entonces cuando podrán salvarse por los pelos de una existencia infeliz. Con
un realismo que entronca con la gran tradición narrativa irlandesa, no exento
de humor, Marian Keyes nos deleita en Por los pelos con las peripecias de estos
jóvenes, en la línea del Diario de Bridget Jones, pero retratando
magistralmente las contradicciones de los protagonistas y con un sólido sentido
de la vida real.
La lectura de este libro
ha sido para mí una auténtica montaña rusa. Como esa prenda que tanteas en la
tienda y acabas comprando entusiasmada por las adulaciones recibidas, pero que
luego, lejos de la emoción compartida en el comercio y una vez con ella en casa
no te convence :-/, no te sientes cómoda con ese atuendo. Hasta que de repente
un día, sin explicación aparente, parece favorecerte y no dejas de elegirla de
entre todo tu vestuario.
Me animé a enredarme con
esta historia a raíz de varias reseñas leídas en blogs amigos. No se ajustaba a
mis preferencias pero… ¡qué narices! Últimamente ya no tenía preferencias, ¡sucumbía
a todo lo que caía en mis manos! Lo empecé con entusiasmo pero… esa exaltación comenzó
a ser inversamente proporcional al número de páginas leídas. Sus personajes no
me convencían en absoluto, ¡no simpatizaba con ninguno! :-O
Tara: treintañera con
problemas de autoestima, lo dice la sinopsis y resulta una evidencia desde el
principio pero, lejos de despertar mi compasión y deseos de escucharla y tenderle
la mano, alimentaba mis ganas de dejarla con un palmo de narices y una
prescripción de “espabilina”. Supongo que parte de culpa la tiene su novio.
Thomas: novio de Tara y
cavernícola a tiempo completo. Es un personaje secundario pero es inevitable
mencionarlo. Os prometo que las perlas que surgen de su boquita de piñón... alimentan
la indignación de cualquiera, y es entonces cuando confirmas que sí, que solo
alguien con la autoestima bajo mínimos puede haberse enamorado de este espécimen.
Katherine: esa
incapacidad para comenzar cualquier tipo de relación no se reduce exclusivamente
a los hombres. Vive como una autómata y sólo pierde muuuuuy ligeramente el
control cuando disfruta de los encuentros con sus amigos (resto de
protagonistas). Vislumbraba que tarde o temprano sabría el porqué de su actitud
e iba a sorprenderme, pero de momento no parecía aportar gran cosa.
Fintan: “el amigo gay
que todas las mujeres desean”. Entiende de moda… te aconseja sobre todo tipo de
temas femeninos… Cumple perfectamente con el estereotipo establecido. Lo que me
apenaba era que un personaje gay estuviera tan tan tan encuadrado en ese cliché
tan manido.
En fin, con este
panorama, avanzaba en la historia pero sin estar muy convencida de que en algún
momento disfrutara de esta lectura. Empezaba a no sentirme en absoluto cómoda
con esta prenda. Pero… entonces llegó el punto en el que las cosas parecían
empezar a cambiar, llegó ese momento que la sinopsis denomina “última
oportunidad”. Los personajes comenzaron a mostrar un poquito más de trasfondo,
y la historia algo más de intensidad. Nuestros personajes debían hacer cambios
en su vida para los que no estaban preparados, pero… ¿quién está preparado para
lo que la vida nos depara?
Reconciliarse con uno
mismo y con el pasado, coger el toro por los cuernos y apostar por un futuro
diferente, afrontar los miedos, lograr el cambio o al menos luchar por él... Ahora
comenzaba a gustarme ese trapito por las reflexiones que me regalaba cuando lo
llevaba puesto. Y, aunque no sé si sería capaz de recomendar su lectura, sí que
puedo afirmar que tampoco me arrepiento en absoluto de haberlo leído.
"No conseguía dormir más de tres horas por noche y se pasaba el resto deambulando por el piso, fumando un cigarrillo tras otro. Se volvió incapaz de actuar con normalidad. Olvidaba aclararse el acondicionador para el pelo. Iba a trabajar en sábado y se sorprendía al ver el edificio cerrado. Iba a la oficina en coche, regresaba en metro y a la mañana siguiente, cuando no encontraba su coche pensaba que se lo había robado. Destapaba un yogur, lo arrojaba a la basura y se quedaba mirando fijamente la tapa, preguntándose qué había hecho mal"
"Para su sorpresa, algo cambió en su interior. Un sólo día - anodino por el simple hecho de estar disponible, sin valor porque había tantos otros - apareció ante ella en primerísimo plano y floreció hasta que cada detalle le pareció entrañable y precioso. Tan valioso como un diamante, desde el despertar con la expectación de la mañana hasta el momento de relajarse a la luz mortecina del atardecer. Sintió la necesidad imperiosa de llenarlo, de aprovecharlo con inteligencia, de hacer todas las cosas deseables, las cosas verdaderamente importantes".
POR LO PELOS
Marian Keyes
No lo he leido
ResponderEliminarInteresante reseña
Un beso
Hola Anuca!no me he leído el libro,pero no sé si me quedan ganas de leerlo...jajaja
ResponderEliminarYa me hice seguidora de tu blog,que me parece súper chulo!
Un besazo guapa! ;) ;) ;)
No lo conocía, gracias por la info, besos Lou
ResponderEliminar¡BIENVENIDA EMMA!
ResponderEliminar